(24 de agosto de 2008)
(Mateo 16, 13-20)
En aquel tiempo, llegó Jesús a la región de Cesarea de Filipo y preguntaba a sus discípulos:
- ¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre?Ellos contestaron: - Unos que Juan Bautista, otros que Elías, otros que Jeremías o uno de los profetas.Él les preguntó: - Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?Simón Pedro tomó la palabra y dijo: - Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo.Jesús le respondió: - ¡Dichoso tú, Simón, hijo de Jonás!, porque eso no te lo ha revelado nadie de carne y hueso, sino mi Padre que está en el cielo. Ahora te digo yo: Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y el poder del infierno no la derrotará. Te daré las llaves del reino de los cielos; lo que ates en la tierra, quedará atado en el cielo, y lo que desates en la tierra, quedará desatado en el cielo.
Y les mandó a los discípulos que no dijesen a nadie que Él era el Mesías.
Palabra del Señor.