Hoy es uno de esos días que a lo largo del año se consideran especiales en la ciudad de Sevilla. Este año, el llamado “Domingo del Pregón” desde luego lo ha sido para nuestra Hermandad. No en vano, nuestro hermano D. Francisco Javier Segura Márquez, revestido del azul y el blanco que dan color a nuestro hábito nazareno, subiría al atril para pronunciar su Pregón de la Semana Santa de Sevilla, anunciando su llegada, y dejando profundos mensajes que a buen seguro alentarán a la reflexión.
Visita a San José Obrero
Antes, el Pregonero quiso visitar algunas de las diversas hermandades a las que pertenece. Empezó muy temprano visitando nuestra Parroquia de San José Obrero y San Francisco de Paula, que es la suya. En compañía de nuestro Hermano Mayor y de otros miembros de la Junta de Gobierno, de nuestro Delegado en el Consejo General de HH. y CC. y de otros hermanos, se efectuó el rezo de la Corona Dolorosa, para pedir parabienes hacia nuestro hermano, en este día tan importante.
Allí, a los pies de la bendita imagen de Nuestra Señora de los Dolores que lo aguardaba en su paso de palio, Francis recibió en préstamo, de las propias manos de la Santísima Virgen, una joya de su ajuar para que la llevase con él en este día, por tratarse de una pieza que guarda un estrecho vínculo familiar con el pregonero.
Antes de continuar su itinerario, Francis rubricó unas palabras en el Libro de Honor de nuestra Hermandad, como recuerdo imborrable de la ocasión.
El Pregón
Y el momento del Pregón llegó, y pasó. Y entre tanto, como placentero regusto en el paladar nos ha quedado la gran obra que sin duda es. No sólo grande en sus versos o en su prosa, grande también en testimonio cofrade y en mensaje cristiano; conmoción de sentimientos, y también de conciencias.
La Hermandad de San José Obrero felicita desde aquí al querido Pregonero de la Semana Santa de Sevilla en este histórico año 2013, por el cometido cumplido, y bien cumplido. Gracias Pregonero, gracias Hermano, gracias Francis.
Effetá en San José Obrero
Visita a San José Obrero
Antes, el Pregonero quiso visitar algunas de las diversas hermandades a las que pertenece. Empezó muy temprano visitando nuestra Parroquia de San José Obrero y San Francisco de Paula, que es la suya. En compañía de nuestro Hermano Mayor y de otros miembros de la Junta de Gobierno, de nuestro Delegado en el Consejo General de HH. y CC. y de otros hermanos, se efectuó el rezo de la Corona Dolorosa, para pedir parabienes hacia nuestro hermano, en este día tan importante.
Allí, a los pies de la bendita imagen de Nuestra Señora de los Dolores que lo aguardaba en su paso de palio, Francis recibió en préstamo, de las propias manos de la Santísima Virgen, una joya de su ajuar para que la llevase con él en este día, por tratarse de una pieza que guarda un estrecho vínculo familiar con el pregonero.
Antes de continuar su itinerario, Francis rubricó unas palabras en el Libro de Honor de nuestra Hermandad, como recuerdo imborrable de la ocasión.
El Pregón
Y el momento del Pregón llegó, y pasó. Y entre tanto, como placentero regusto en el paladar nos ha quedado la gran obra que sin duda es. No sólo grande en sus versos o en su prosa, grande también en testimonio cofrade y en mensaje cristiano; conmoción de sentimientos, y también de conciencias.
La Hermandad de San José Obrero felicita desde aquí al querido Pregonero de la Semana Santa de Sevilla en este histórico año 2013, por el cometido cumplido, y bien cumplido. Gracias Pregonero, gracias Hermano, gracias Francis.
Effetá en San José Obrero
[…] Effetá para las túnicas
de estreno recién planchadas,
Effetá en San José Obrero
que estrena antifaz y capa,
Effetá de las mantillas,
Effetá de tardes largas
soñando las camareras
el momento de arreglarla.
Padre Víctor que desde el cielo nos miras
[…] Mía, como es también
San José Obrero, que inicia
su camino penitente
con dos pasos en seis días,
Jesús de la Caridad,
sobre lirios y cardina,
y Dolores, que en mi barrio,
sueña con su calle Pinta
cuajada de nazarenos
blanquiazules en dos filas.
Mi barrio de penitencia,
Mi barrio, que no se olvida,
de tu apoyo, Padre Víctor
que desde el cielo nos miras.
“La Fe nace en la Parroquia”,
y en mi parroquia os diría,
que mi fe, viendo a los Mínimos,
se aumenta y se multiplica.
Donde yo vaya, diré
lo mismo, pues no es mentira:
mi Parroquia me hizo grande
por dentro y mientras crecía,
me enseñó que no hay distancias,
límites ni cortapisas
cuando nos quema en las manos
el fuego que evangeliza.
San José Obrero, que inicia
su camino penitente
con dos pasos en seis días,
Jesús de la Caridad,
sobre lirios y cardina,
y Dolores, que en mi barrio,
sueña con su calle Pinta
cuajada de nazarenos
blanquiazules en dos filas.
Mi barrio de penitencia,
Mi barrio, que no se olvida,
de tu apoyo, Padre Víctor
que desde el cielo nos miras.
“La Fe nace en la Parroquia”,
y en mi parroquia os diría,
que mi fe, viendo a los Mínimos,
se aumenta y se multiplica.
Donde yo vaya, diré
lo mismo, pues no es mentira:
mi Parroquia me hizo grande
por dentro y mientras crecía,
me enseñó que no hay distancias,
límites ni cortapisas
cuando nos quema en las manos
el fuego que evangeliza.
Texto íntegro del Pregón pulsando aquí.
