En estos días tan entrañables, el Cartero Real anda de un lugar a otro recogiendo todas las cartas que los niños quieren hacer llegar a Sus Majestades los Reyes Magos. Un año más, el mensajero de la ilusión fue fiel a la cita en San José Obrero. Y en esta ocasión, además, ha querido visitar las calles de la feligresía acompañado de todo su séquito beduino.
La comitiva, precedida por una formación musical de cornetas y tambores reunida para la ocasión, anunciaba con gran alegría y colorido, a paseantes y vecinos, que el Cartero Real había llegado.
El Cartero Real, acompañado por sus ayudantes, recorrió las calles en un carruaje tirado por un precioso caballo blanco.
A medida que el cortejo avanzaba, se sumaban niños y niñas para aprovechar la oportunidad de despachar con el Cartero Real.
A la llegada al salón parroquial, el Cartero Real inició la Audiencia con todos los numerosos presentes. Durante dos horas estuvo recibiendo las numerosas cartas, que superaron generosamente la centena. También repartió muchos caramelos y algunos juguetes.
El Cartero Real se despidió de todos, hasta el año que viene, pues debe continuar su afanada labor, no sin prometer que en pocos días serán Sus Majestades quienes lleguen desde el lejano Oriente, pues no querrán dejar de visitar a algunos de los mayores del barrio. Alegría e ilusión para todos.
Fotografías: M. Martín V.
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