La pasada semana, del ocho al diez de junio, nuestra Hermandad consagró Solemne Triduo a Jesús Sacramentado, con la predicación de nuestro Director Espiritual y Párroco Rvdo. Padre Víctor García.
Fueron días de reflexión y preparación que habrían de culminar con la celebración de la solemnidad del Corpus Christi.
Fueron días de reflexión y preparación que habrían de culminar con la celebración de la solemnidad del Corpus Christi.
Así, en la calurosa pero no menos bella mañana del jueves día once de junio, una nutrida representación de nuestra corporación acudió a la S.M.P.I Catedral de Sevilla, para acompañar a su Divina Majestad en el cortejo de la Procesión del Corpus Christi.
El domingo día catorce fue un día grande en nuestra Hermandad, Parroquia y barrio de San José Obrero. Ya en la víspera se palpaba un ambiente especial en sus calles y plazas, pues muchos de sus vecinos se afanaban en los prepararativos y exornos, que culminarían con el montaje de los numerosos altares a primeras horas del día siguiente.
Momentos antes de las nueve y media de la mañana, el oficiante, acompañado por la Comunidad Mínima y la Junta de Gobierno, y precedido por el acolitado, partía desde el Templo hasta la plaza adyacente a la calle Pintor González Santos, repleta de pueblo y engalanada con esmerada profusión, y donde instantes después daba comienzo la Solemne Eucaristía.
En el Día de la Caridad, el Padre Víctor recordaba en su homilía a cuantos tienen hambre de Dios hecho Eucaristía, al igual que otros muchos que tienen hambre de pan. Para ambos casos, para los hambrientos de Dios y para los de pan, nuestra Parroquia está a su disposición, sea en la figura del sacerdote los primeros, sea en el grupo de Cáritas Parroquial los segundos, donde siempre se les escuchará, informará, e intentará ayudar en todo lo posible. Tristemente vemos cuánto puede gastarse para la muerte a través de la Guerra, y qué insuficientes son los esfuerzos para evitar que tantas vidas sean arrebatadas por el hambre. Si de verdad queremos a nuestros semejantes, ¿podemos dejarlos pasar hambre impasiblemente?. Palabras que merecen una reflexión.
Tras la celebración, dió comienzo la Procesión por las calles del barrio. Como es costumbre, las pequeñas andas con el niño Jesús fueron portadas por niños y niñas de Primera Comunión, en un día en el que son verdaderos partícipes y protagonistas... Dios los bendiga.
Este año, su Divina Majestad recorrió las calles dispuesto en un templete sobre andas portadas por jóvenes costaleros.
El acompañamiento musical estuvo a cargo como de costumbre por la Agrupación Musical Nuestro Padre Jesús de la Salud, que interpretó diversos cantos litúrgicos y tradicionales.
A lo largo del recorrido, se repetían sencillas pero sinceras muestras de alabanza a Jesús Sacramentado.
Es de justicia destacar la implicación de los vecinos en esta celebración tan señalada, engalanando sus fachadas y calles, y elevando numerosos altares para recibir al Señor; el Padre Víctor dirigió oraciones en cada uno de ellos.
Una vez de vuelta en el Templo, se procedió a la oración final y a la reserva del Santísimo. Por último, todos los niños dedicaron un canto a la bendita imagen de Nuestra Señora de los Dolores.
Felicitamos a nuestro Cuerpo de Acólitos, por su meritoria participación en todos los cultos celebrados.
Asimismo, felicitamos a la cuadrilla de jóvenes costaleros por su buen hacer, así como a los auxiliares, Grupo Joven, y grupo de Priostía que, como siempre, han contribido con su esfuerzo y dedicación a la mayor solemnidad y esplendor de cuantos cultos consagra nuestra Hermandad.
Por último, felicitamos desde aquí a toda nuestra Hermandad, Comunidad Parroquial, Comunidad de Frailes Mínimos, a todos los niños y niñas que este año han recibido por primera vez al Señor, y cómo no, a todos los vecinos y fieles, especialmente a cuantos han tenido a bien poner su granito de arena, y dar testimonio de la presencia de Jesús hecho Eucaristía en las calles de San José Obrero.Fotografías: F. L. Durán O., M. Martín V. y F. Sánchez V.
