Solemnidad de Santiago Apóstol,
Patrón de España
Palabra del Señor.
Patrón de España
(25 de julio de 2010)
(Mateo 20, 20-28)
En aquel tiempo se acercó a Jesús la madre de los Zebedeos con sus hijos y se postró para hacerle una petición. El le preguntó:
-- ¿Qué deseas?
Ella contestó:
-- Ordena que estos dos hijos míos se sienten en tu reino, uno a tu derecha y otro a tu izquierda.
Pero Jesús replicó:
-- No sabéis lo que pedís. ¿Sois capaces de beber el cáliz que yo he de beber?
Contestaron:
-- Lo somos.
El les dijo:
-- Mi cáliz lo beberéis; pero el puesto a mi derecha o a mi izquierda no me toca a mí concederlo, es para aquellos para quienes lo tiene reservado mi Padre.
Los otros diez, que lo habían oído, se indignaron contra los dos hermanos. Pero Jesús reuniéndolos les dijo:
-- Sabéis que los jefes de los pueblos los tiranizan y que los grandes los oprimen. No será así entre vosotros; el que quiera ser grande entre vosotros, que sea vuestro servidor, y el que quiera ser el primero entre vosotros, que sea vuestro esclavo. Igual que el Hijo del hombre no ha venido para que le sirvan, sino para servir y dar su vida en rescate por muchos.
-- ¿Qué deseas?
Ella contestó:
-- Ordena que estos dos hijos míos se sienten en tu reino, uno a tu derecha y otro a tu izquierda.
Pero Jesús replicó:
-- No sabéis lo que pedís. ¿Sois capaces de beber el cáliz que yo he de beber?
Contestaron:
-- Lo somos.
El les dijo:
-- Mi cáliz lo beberéis; pero el puesto a mi derecha o a mi izquierda no me toca a mí concederlo, es para aquellos para quienes lo tiene reservado mi Padre.
Los otros diez, que lo habían oído, se indignaron contra los dos hermanos. Pero Jesús reuniéndolos les dijo:
-- Sabéis que los jefes de los pueblos los tiranizan y que los grandes los oprimen. No será así entre vosotros; el que quiera ser grande entre vosotros, que sea vuestro servidor, y el que quiera ser el primero entre vosotros, que sea vuestro esclavo. Igual que el Hijo del hombre no ha venido para que le sirvan, sino para servir y dar su vida en rescate por muchos.
Palabra del Señor.