Blancura de vida, morado de pasión, Bandera blanca de vida,
Vía Crucis de dolor en San José.
Humilde en tu grandeza que cargas con nuestros pecados,
levanta tu mirada para que veamos tu Amor.
Vía Crucis de dolor en San José.
Humilde en tu grandeza que cargas con nuestros pecados,
levanta tu mirada para que veamos tu Amor.
Las manos de la Caridad abrazan el madero de salvación, sus manos redimen todo dolor, pecado y muerte.
Y gritamos como el ciego de Jericó: “Jesús hijo de David, ten compasión de mi”,
y el Señor de la Caridad nos hace recobrar la vista.
Y gritamos como el ciego de Jericó: “Jesús hijo de David, ten compasión de mi”,
y el Señor de la Caridad nos hace recobrar la vista.
Tú, Caridad doliente, eres faro y luz para el enfermo,
esperanza para el humilde, riqueza y fe para el pobre.
Levanta tu mirada para que veamos tu Amor.
esperanza para el humilde, riqueza y fe para el pobre.
Levanta tu mirada para que veamos tu Amor.
Texto: José Antonio Barroso Domínguez
Fotografías: M. Martín V.
Fotografías: M. Martín V.