sábado, 3 de octubre de 2009

Crónica de los Solemnes Cultos en honor a Nuestra Señora de los Dolores (primera parte)

Un año más, nuestra Hermandad consagró Solemnes Cultos en honor a Nuestra Señora de los Dolores, cultos que comenzaron con el rezo de la Corona Dolorosa del día ocho al catorce de septiembre, y cuyas reflexiones sobre los Siete Dolores de la Santísima Virgen vinieron a prepararnos para celebrar la onomástica de nuestra amantísima titular.

En este marco, durante los días doce y trece la bendita imagen estuvo expuesta en Devoto Besamanos, a la veneración de los numerosos hermanos y fieles que en esos días acudieron a la presencia de nuestra Madre.

Como siempre, es digno de mención el buen hacer del equipo de Priostía, por el elegante altar elevado para este culto, de corte clásico y sencillo exorno floral.

Qué decir de la majestuosa belleza de la Santísima Virgen que no diga por sí misma sólo con mirarla. La bendita imagen lució como estreno un broche realizado por n.h.d. Miguel Ángel Alonso Ponce.

En la tarde del sábado día 12 de septiembre, ante la presencia de nuestra Madre, tuvo lugar el acostumbrado Acto de Oración y el rezo del Santo Rosario en sus Misterios Gloriosos, dirigidos por nuestra Promotora Sacramental.

Momentos de reflexión, recogimiento y elevación espiritual, donde además de contemplar su belleza exterior, profundizamos en la verdadera belleza que reside en el interior de María, la Madre del Señor, que aceptó sin reservas la voluntad de Dios ["hágase en mí según tu palabra"], y que es modelo a seguir.

En la tarde del domingo día 13 al término de la Eucaristía, n.h.dª. Martina Rodríguez Caravallo hizo entrega de una preciosa Rosa de Pasión realizada por ella misma.

Llegado el día quince de septiembre, onomástica de la Virgen de los Dolores, se celebró la Misa Solemne en su honor con numerosa asistencia de hermanos y fieles. En la celebración nos acompañó una representación de la querida Hermandad de Nuestra Señora de Araceli.

Tras la Comunión, se hizo entrega de un cuadro con la imagen de nuestra titular mariana a n.h.d José Antonio León Rodríguez, por su sabida devoción a nuestros sagrados titulares y sus contínuas muestras de generosidad y dedicación para con ellos.

Al igual que en los días precedentes, la celebración culminó con el canto de la Salve a nuestra Madre de los Dolores.

También ese día fue presentado a la Santísima Virgen un delicado pañuelo del siglo XIX, donado por n.h.d. Francisco Javier Segura Márquez y D. Federico Carrasco Linares.

Días sin duda entrañables, en los que nuestros hermanos en particular y toda nuestra Comunidad Cristiana de San José Obrero y San Francisco de Paula en general, demostraron nuevamente con sus oraciones, besos y ofrendas, que en sus corazones prende la llama del cariño y la devoción a la Santísima Virgen, venerada en nuestro templo con la advocación de Nuestra Señora de los Dolores.

Que Ella nos mire con ojos bondadosos, interceda ante el Señor por el perdón de nuestras faltas, y nos guíe en nuestro caminar diario. Así sea.

Fotografías: Ana Belén Boza y M. Martín V.

Galería del devoto Besamanos

Galería del devoto Besamanos (ampliada)